M. Night Shyamalan atrapa a Josh Hartnett: un thriller impredecible que no debe perderse
Un nuevo thriller de M. Night Shyamalan cautiva a los espectadores
El último thriller de M. Night Shyamalan, Trap, puede ser su película más extravagante hasta el momento, lo que dice mucho sobre el hombre que nunca duda en correr grandes riesgos. El resultado es una experiencia entretenida para aquellos dispuestos a dejar de lado todo pensamiento crítico antes de entrar a la arena.
La historia de la trampa
La película comienza con Cooper (Josh Hartnett), elegido padre del año, llevando a su hija Riley (Ariel Donoghue) a ver a la estrella pop Lady Raven (interpretada por la hija del director, Saleka Shyamalan) en concierto. Mientras Riley canta las canciones de Lady Raven en el auto, Cooper muestra su amor por su hija a pesar de sus notas falsas. Pero aquí está la cuestión: cuando Cooper se encuentra solo en el baño, descubre que en realidad es el asesino en serie trastornado conocido por todos como “El Carnicero”. Y su última víctima está encadenada en un horrible sótano. La situación da un giro inesperado cuando el FBI descubre la presencia del Carnicero en el concierto y rodea la sala.
Tensiones y giros y vueltas
La película cautiva porque sigue a Cooper intentando escapar de la enorme sala de conciertos, con una tensión creciente y giros divertidos. La interpretación de Hartnett es excelente y el guión sabe mantener la atención añadiendo varios momentos inesperados. Mientras tanto, Riley vive su propio drama como fan de Lady Raven y el director explota hábilmente los aspectos de la celebridad y la actitud de los fans.
Una mezcla de cultura pop y suspenso.
A pesar de su carácter entretenido, la película intenta explorar la naturaleza del mal a través de la intervención de una criminóloga interpretada por la actriz británica Hayley Mills. Trap, sin embargo, no logra alcanzar el mismo nivel de rareza que las películas anteriores de Shyamalan, pero su pulida dirección y sus cautivadoras actuaciones la convierten en una experiencia cinematográfica que vale la pena. Signo distintivo del autor, Shyamalan hace acto de presencia en la película, añadiendo una dimensión adicional al conjunto.
Conclusión y nota final
En definitiva, Trap se posiciona como una buena película de entretenimiento que combina cultura pop y suspense, aunque a veces le falta un toque de la propia locura de Shyamalan. Con buenas dosis de tensión y sólidas actuaciones, la película logra cautivar al público hasta el final. Una historia cautivadora que sorprenderá a los fanáticos del género. Calificación final: B+
Fuente: ew.com